Tallarines caseros con salmón, gambas y cúrcuma

Es curioso los motivos que nos llevan a elegir una receta en concreto y no otra. A veces la leemos en un libro o en un blog, a veces nos inspiramos en una receta que vimos en alguna parte, cambiando cosas o ingredientes. Otras, y esas son mis preferidas, partimos de algún recuerdo, de algún momento, e intentamos traducir eso en el plato. Esta es una de esas ocasiones.
Hace unos días fui a cenar a un restaurante italiano. El día fue maravilloso y la cena casi mejor. Mi acompañante pidió unos raviolis rellenos gambas y salmón, que pude probar y estaban riquísimos. No es una receta complicada ni nada parecido, pero he querido hacer pasta casera inspirada en aquella cena y los buenos momentos de aquel día. Espero que os guste.



Para hacer pasta casera, seguí los pasos que ya os indiqué aquí. Es muy sencillo:

Cómo hacer pasta fresca casera.
 Ingredientes:
  - Las proporciones son de un huevo por cada 100 gramos de harina. En esta ocasión, yo puse 300 gramos de harina y salió bastante pasta para cuatro personas. No lleva nada más. No le echéis sal, ni aceite ni ninguna otra cosa.  Un poco de harina en la mesa mientras vais trabajando la masa.
     Una nota sobre la harina. Las otras veces que la hice, por desconocimiento, usé solo una harina de fuerza. Esta vez usé una mezcla y las diferencias hacen que merezca la pena. Se mezcla harina de fuerza con vuestra harina habitual  (en una proporción de 70% de fuerza y 30% de normal), se tamiza, y ya podéis empezar a hacer pasta casera.

Elaboración:
  Como os dije, mezclad ambas harinas, tamizadlas y hacer un volcán en un cuenco. En el centro del volcán, echad los huevos sin batir. Con la ayuda de un tenedor, mezclad harina y huevo en movimientos circulares de afuera hacia adentro. Cuando hayais conseguido una masa con cierta consistencia, pasadla a la mesa  y trabajadla como 10-15 minutos, hasta que sea homogénea. Haced una bola redonda, envolvedla en papel film y metedla en la nevera durante una hora. Pasado este tiempo ya podéis trabajar con ella, ya sea a mano y rodillo o con la máquina. Después de pasarla varias veces por cada rodillo, decidí usar el cabezal de spaghetti, y la verdad, salen estupendos. Cuando tengáis vuestra pasta en la forma definitiva, dejadla secar un buen rato antes de cocerla y preparad el resto del plato.


Tallarines caseros con salmón, gambas y cúrcuma

Ingredientes:
- 400 gramos de tallarines
- Un lomo mediano de salmón. (se puede usar salmón ahumado por supuesto, pero yo aproveché un lomo solitario que me había sobrado de otra receta. Lo laminé fino y lo partí en trozos pequeños)
-  Unas cuantas gambas (obviamente va al gusto. Yo eché como una docena)
-  Zumo de media naranja
-  Un chorrito de cognac
-  Una nuez de mantequilla
-  Sal, pimienta. Un poco de cúrcuma. Un poco de albahaca.
-  100 ml de nata líquida

Elaboración
- Hervimos los tallarines. En este caso, al ser pasta casera, recordad que es 1 litro de agua por cada 100 gramos de pasta, y sólo durante 2-3 minutos. Le podéis echar sal, pero nunca aceite. Le echamos también una cantidad de cúrcuma, suficiente para que coloree la pasta.
- Ponemos la mantequilla en una sartén grande al fuego. Una vez derretida y a fuego vivo, echamos los trozos de salmón laminado y cortado, dejando que se dore un poco. Añadimos las gambas (descongeladas si es el caso, y peladas). Salpimentamos, y pasados unos segundos, añadimos el zumo de media naranja y el chorrito de cognac, mientras se mezclan los sabores y se evapora el alcohol.
- Añadimos a esta mezcla los 100 ml de nata líquida y la integramos bien, hasta que coja algo de color.
- Escurrimos la pasta y bien seca, la incorporamos a la mezcla anterior. Reservamos una taza de agua de cocción de la pasta, que iremos añadiendo a medida que necesitemos, si al mezclar los tallarines la salsa se nos queda demasiado espesa.
- Espolvoreamos un poco de albahaca seca, y ya está listo para comer.

2 comentarios:

  1. Ohh solo con la foto ya empiezo a babear, y con lo que a mi me gusta la pasta y lo poco que la suelo comer, que no se puede uno pasar...voy a mirar la suscripcion que no se proque no me llegan todas tus actualizaciones ;)

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    1. Anímate a hacerla casera, que es fácil y verás cómo aprecias la diferencia. Y si no, bueno, hacerla con la comprada ya ves que no tiene mucho misterio :)
      Un saludín, Eri :)

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